Lola López de Lacalle se ha tomado su tiempo para escribir su primera novela, Melocotones de Viña. Por más que afirma que sólo ha recuperado una de sus aficiones de juventud, en ella ha sabido crear una historia de solidaridad entre mujeres, volcando una buena parte de sus lecturas y el amor por una tierra, la Rioja Alavesa, que conoce bien. El próximo jueves, 16 de mayo, a las 19:30h, estará en Urrike Liburudenda presentando el libro, dispuesta a charlar de lo que surja con quienes quieran acercarse. Para conocer un poco mejor a la autora, le hemos pedido que conteste a alguna preguntas, y esto es lo que nos ha contado.

Por favor, háblanos de ti, quién eres, qué escribes, en qué estás trabajando ahora.

Soy una mujer que como tantas ha recuperado una de las aficiones de su juventud y le ha dado forma.

Siempre me ha gustado escribir y no debía de hacerlo del todo mal, porque llegué a la final del Concurso de Redacción de Coca-cola.  Las más jóvenes no lo recordarán, pero las que tenemos una edad, seguro sí.

He escrito desde pequeña, pero cuando te haces mayor, la deriva que a veces coge tu vida, hace que olvides las aficiones. Así que cuando cumplí los cincuenta decidí que ya tenía edad para hacer lo que más me gusta, y eso es escribir, así que me puse a ello.

Empecé con cuentos infantiles, algo que me gusta mucho y relatos después, hasta que empecé con novela. Melocotones de viña es la primera.

Ahora estoy trabajando en otra, pero el tema se complica, porque la promoción de Melocotones, que un año después sigue muy viva, apenas me deja tiempo.

¿Qué pueden esperar quiénes se animen a leer Melocotones de Viña?

La novela habla básicamente de mujeres. De la solidaridad entre nosotras que nos hace más fuertes. Habla también de una época oscura; de los abusos que entonces se cometieron y de otra más luminosa, pero siempre bajo la perspectiva de las mujeres; sometidas durante la posguerra y con derechos casi recién conquistados ahora.  Del paisaje de Rioja Alavesa. De las nubes colgando sobre la sierra como si fueran a derramarse sobre los viñedos. De las Carboneras, niñas muchas de ellas, que cruzaban la sierra de Cantabria para vender el carbón en los  pueblos.

Habla de vides viejas y retorcidas y también de las  jóvenes… Habla de nosotras.

 Es tu primera novela, ¿qué fue lo más difícil de escribirla?

Sobre todo emoción. La he escrito con mucha emoción y creo que el hecho de que haya tenido tan buena acogida se debe fundamentalmente a que he sabido transmitirla y después una historia de mujeres que luchan por sobrevivir en una época difícil

¿Cuáles son tus referentes?¿ Quiénes son tu autores favoritos?

Mis gustos son variados: Ana María Matute, Irene Nemirovsky, Atxaga, los clásicos americanos como Scott Fitzgerald, Penelope Fitzgerald o Cappote…  las hermanas Brönte, Oates , Chimamanda Ngozi Adicchie y un montón de gente que escribe maravillosamente y cuenta grandes historias… y Delibes.

¿Qué libro estás leyendo ahora?

Ahora estoy con dos a la vez: La librería de Penelope Fitzgerald y La edad de la inocencia, de Edith Warton y acabo de terminar Ausentes del Cielo de Alex Oviedo.

¿Qué libro nos recomendarías y por qué?

Sin duda Olvidado Rey Gudú de Ana María Matute. Cuenta la historia de un reino de fantasía con cierto realismo mágico. Desde la primera a la última pagina destila imaginación y ternura.

Otro que también me gusta mucho es Suite Francesa de Irene Nemirovsky.

Para terminar, cuéntanos en qué va a consistir la presentación de tu libro el próximo día 16 de mayo en Urrike Liburudenda.

Voy abierta a que hablemos de lo que queráis. De lo que tengáis interés. Aunque de lo que si quiero hablaros es de lo que yo llamo “La poderosa Metáfora de los Melocotones de Viña”. Una historia de Solidaridad entre mujeres”

¿Te animas a venir? Recuerda reservar tu asiento con antelación.